Carrión era un joven estudiante del último año de medicina y estaba investigando la enfermedad de la Verruga para su tesis de bachiller

El 5 de octubre, el Ministerio de Salud celebra el Día de la Medicina Peruana como homenaje a la inmolación de Daniel Alcides Carrión (1885). Se inoculó sangre contaminada con la enfermedad de la Verruga para saber los síntomas tenues previos a su desarrollo. Murió por una causa, la del conocimiento.

Carrión era un joven estudiante del último año de medicina y estaba investigando la enfermedad de la Verruga para su tesis de bachiller. Hacía el internado en el Hospital de San Bartolomé y analizaba las historias clínicas de nueve pacientes en el Hospital Dos de Mayo. A este hospital llegaba la mayor cantidad de personas con esta enfermedad.

Luego de meditarlo, el joven estudiante optó por un método de investigación válido en su época, la autoexperiencia. Durante su inoculación estuvo acompañado por sus maestros Leonardo Villar y Evaristo Chávez. Varios días después Carrión, muy enfermo, fue llevado al hospital francés Maison de Santé para recibir una transfusión sanguínea según indicación de la junta médica que lo asistió.

La transfusión de sangre no se realizó porque su estado general empeoró. Era una época en la que no había reposición de fluidos ni de electrolitos y las transfusiones de sangre no eran seguras. Se debe recordar que los grupos sanguíneos fueron descubiertos en 1901 y la primera transfusión exitosa se hizo en 1907.

Carrión nunca pensó en morirse. Se topó con la muerte accidentalmente. Él falleció de una enfermedad que la medicina de su época no pudo diagnosticar ni tratar adecuadamente. Sin embargo, la autoexperiencia de Carrión sirvió como un estímulo para una nación peruana devastada por la guerra, unió a un desesperanzado país y fue un incentivo para que los médicos peruanos continúen investigando.

La experiencia mortal de Carrión resume el interés de un joven estudiante de medicina empeñado en conocer una enfermedad autóctona. Su gesto dura en el tiempo y por eso, en esta fecha se le recuerda como el mártir de la medicina peruana.